Los mercados globales registraron ganancias el 26 de noviembre de 2025, impulsados por crecientes expectativas de que la Federal Reserve (Fed) de Estados Unidos recortará sus tasas de interés a finales de año, lo que mejoró el ánimo de inversionistas frente a activos de riesgo.
Entre los factores que explican este optimismo figura un conjunto de datos económicos recientes en EE. UU. que mostraron un desempeño inferior al esperado en sectores clave, lo que reavivó la percepción de que la Fed adoptará una política monetaria más laxa. Esto elevó los precios de acciones y bonos globales, en un contexto de rotación hacia mercados emergentes y activos denominados en dólar.
Analistas financieros advierten que, aunque la tendencia alcista es positiva, persisten riesgos derivados de la volatilidad macroeconómica, tensiones geopolíticas y posibles decisiones adversas en materia de regulación en sectores clave como energía, tecnología y deuda pública. Recalcan que la estabilidad dependerá de cómo evolucionen los indicadores globales en los próximos meses.
