Los gobiernos de Rusia y Ucrania acordaron iniciar una ronda de conversaciones destinadas a avanzar en un eventual acuerdo de paz sobre el conflicto en curso, a través de un “grupo de trabajo” conjunto en el que participarán representantes clave de cada país y mediadores estadounidenses. El anuncio se realizó el 28 de diciembre de 2025, al término de una reunión entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el presidente ucraniano Volodímir Zelenski en Mar-a-Lago, Florida.
Trump informó que la propuesta fue bien recibida tanto por Kiev como por Moscú, y que el mecanismo funcionará durante las próximas semanas con el objetivo de resolver las diferencias en torno a aspectos centrales del conflicto, incluidos el alto al fuego, las garantías de seguridad para Ucrania y el futuro de las regiones orientales ocupadas por fuerzas rusas. Aseguró que el grupo de trabajo incluirá a altos funcionarios de seguridad y diplomáticos de ambos bandos.
En la conferencia de prensa conjunta, Zelenski expresó su esperanza de que el diálogo pueda producir decisiones concretas en enero de 2026, basadas en seis documentos de trabajo que abordarían temas complejos como la participación de la OTAN y de Europa en garantías de seguridad y cómo se implementaría un eventual alto al fuego. Tanto Washington como Kiev destacaron la importancia de involucrar directamente a Rusia en estos esfuerzos multilaterales para avanzar en la paz.
El Kremlin confirmó que Vladímir Putin aceptó la propuesta de establecer estos grupos de trabajo, aunque no se precisó si las negociaciones incluirán temas como zonas desmilitarizadas o comercio en el Donbás. Las partes manifestaron que aún enfrentan dificultades en varios puntos del acuerdo, pero coincidieron en que el grupo de trabajo podría ser un mecanismo eficaz para acercar posiciones antes de una posible firma de acuerdos más amplios.
