El dormir adecuadamente trae múltiples beneficios en la salud de cada individuo, todo ser humano en cada faceta de su vida debe cumplir una cantidad de horas adecuadas. Un recién nacido debe de dormir 20 horas aproximadamente, un adolescente debería de dormir entre 7 y 9 horas, un adulto debe cumplir de 6 a 8 horas para llevar a cabo sus actividades de la mejor manera.
Se tienen bajos niveles de rendimiento cuando el ser humano duerme menos. La hipersomnia es la tendencia al sueño en situaciones anormales, es decir es una facilidad excesiva para conciliar el sueño durante el día. Es un síntoma que puede padecer múltiples enfermedades, o estar en relación con la ingesta de fármacos.
El dormir más de las 8 horas provoca caer en un sueño ligero, es decir se lleva a cabo el proceso, pero no se descansa y causa rigidez en los músculos, especialmente en los puntos de tensión, provocando molestias durante el día.
El dormir mucho es un signo claro de la depresión y por lo tanto afecta en el estado de ánimo. Además las medicinas que se llegan a consumir para contrarrestar esta enfermedad mental, pueden provocar alteraciones importantes en el sueño trayendo como resultado el insomnio o en su caso la hipersomnia.
El cuerpo humano presenta funciones diferentes durante el proceso del sueño a comparación de las que realiza en el día. Cuando se lleva a cabo el proceso de descanso los niveles de azúcar salen de su estado automático provocando aumento de azúcar en la sangre, en caso de que sobrepasen las 8 horas estos niveles de azúcar se descontrola provocando una cercanía aún mayor a la diabetes.
El no descansar adecuadamente la concentración disminuye y aumenta el cansancio, provocando bajos niveles de rendimiento durante el día. Lo recomendable es que se completen las horas adecuadas para mitigar estos efectos y no depender de fármacos para estimular el sueño, ya que estos producen dependencia a estos.
