Celia Lora fue acusada de homicidio culposo tras un accidente automovilístico ocurrido hace 14 años, en el que un hombre perdió la vida. Sin embargo, según su versión, ella no fue responsable del atropello, sino que el accidente se produjo cuando chocó contra una camioneta, la cual fue la que luego arrolló al hombre. Lora relató que ese día regresaba a su casa después de una cena cerca de su domicilio, en la que solo había consumido una cerveza.
A pesar de su explicación, las autoridades la arrestaron y Lora pasó tres meses en el Reclusorio Femenil de Santa Martha Acatitla. Posteriormente, obtuvo su libertad condicional luego de pagar una fianza de 20 mil pesos. Durante el proceso, además de la acusación penal, Lora enfrentó demandas económicas por parte de quienes decían ser familiares del fallecido, quienes inicialmente solicitaron 2 millones de pesos, una cifra que más tarde fue aumentada a 10 millones.
En un intento por llegar a un acuerdo, la madre de Lora ofreció la casa de su abuela como parte de la compensación económica, pero la propuesta fue rechazada. Durante el juicio, se descubrió que las personas que reclamaban ser familiares del fallecido no tenían relación con él, lo que favoreció la defensa de Lora. A lo largo de este proceso, Lora ha insistido en su inocencia y ha compartido que su tranquilidad provino de saber que no había cometido el delito que se le imputaba.
Hoy en día, Lora sigue manteniendo su versión de los hechos y ha señalado que, aunque el proceso fue difícil, la certeza de su inocencia y su confianza en la verdad fueron fundamentales para enfrentar la situación.
