España ha aprobado recientemente una nueva ley de salud mental que busca transformar el enfoque del país sobre los trastornos mentales. Esta ley, que entra en vigor en 2025, tiene como objetivo mejorar la atención sanitaria y garantizar derechos fundamentales a las personas con problemas de salud mental. El marco legal establece que las personas afectadas por estos trastornos tengan acceso a tratamiento de calidad, así como un sistema de atención integral. Además, se reconoce la importancia de la prevención y la educación para reducir el estigma social asociado con estos problemas.
El gobierno también ha creado un plan de formación para los profesionales de la salud, que incluirá nuevas estrategias y herramientas para abordar la salud mental en distintos niveles. Los defensores de la ley destacan que, a diferencia de las legislaciones anteriores, esta ley coloca a la persona en el centro del tratamiento, con una atención más personalizada.