La restauración de la Virgen de la Macarena en Sevilla ha causado controversia tras los trabajos realizados por el equipo del profesor Arquillo. La imagen, intervenida durante cinco días, volvió al culto con cambios en las pestañas y retoques en el rostro que generaron críticas entre los devotos. La hermandad realizó dos intervenciones adicionales en menos de 24 horas para ajustar la apariencia, pero el descontento persiste entre los fieles y ha llevado a la dimisión del mayordomo y el prioste.
El caso ha trascendido fronteras, con medios internacionales como The Times en Londres informando sobre los cambios en la Virgen del siglo XVII. En Estados Unidos, el podcast de la Universidad de Georgetown, dirigido por Juan Carlos Iragorri, destacó la relevancia de la Macarena en América Latina y la controversia por su nueva apariencia. Publicaciones en redes sociales y periódicos latinoamericanos también han abordado el tema, reflejando el impacto global de la imagen sevillana.
La hermandad ha optado por el silencio hasta analizar los informes de las intervenciones. Las críticas se centran en la falta de una comisión de seguimiento durante el proceso, lo que ha generado debate sobre la gestión de la restauración. Mientras, la Virgen permanece en veneración en la basílica, donde los fieles acuden a observar los cambios, que han alterado la expresión característica de la imagen.