El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, comunicó durante su sexta reunión de gabinete, celebrada el 8 de julio en la Casa Blanca, la imposición de un arancel del 50% a las importaciones de cobre. La medida, que se suma a los gravámenes ya aplicados al acero y al aluminio, busca fortalecer la industria nacional y reducir la dependencia de proveedores extranjeros. Sin embargo, no se precisaron detalles sobre la fecha de entrada en vigor de este nuevo arancel.
Según el secretario de Comercio, Howard Lutnick, los gravámenes podrían implementarse a partir del 1 de agosto o incluso antes. Trump también anunció que contempla un arancel de hasta el 200% para los productos farmacéuticos si sus fabricantes no trasladan su producción a territorio estadounidense.
Durante la reunión, el mandatario republicano otorgó un plazo de entre un año y un año y medio para que las empresas farmacéuticas establezcan operaciones en el país, con el objetivo de evitar el pago de estas tarifas.
“Les daremos aproximadamente un año, un año y medio, para venir. Después se les aplicarán aranceles si tienen que traer productos farmacéuticos, medicamentos y otros artículos”, afirmó Trump.