Un menor de nueve años fue arrestado en Perú tras encabezar una banda que se dedicaba a cometer asaltos en unidades de transporte público. El grupo, conformado por seis integrantes de entre 9 y 16 años, operaba con armas blancas y objetos punzocortantes con los que intimidaban a los pasajeros para despojarlos de sus pertenencias.
La banda fue detenida por la policía en el momento en que intentaban ejecutar un atraco. Según reportes oficiales, el menor identificado como líder había participado en otros delitos previos, lo que evidenció una estructura organizada detrás de estos actos. El caso ha despertado preocupación por la creciente presencia de menores en actividades delictivas en el país.
En lo que va del año 2025, más de un centenar de menores han sido detenidos por delitos similares en diversas regiones de Perú. Las autoridades atribuyen este fenómeno a entornos familiares con antecedentes criminales o a contextos de abandono y violencia estructural, que facilitan la reproducción de estas conductas desde edades tempranas.
El incremento en la participación de menores en actos delictivos plantea un reto para las instituciones encargadas de la seguridad pública y la protección de la infancia. La falta de programas preventivos y de atención psicosocial profundiza la vulnerabilidad de esta población frente a estructuras delictivas.