“No acostumbro a dar declaraciones”, respondió el coordinador de Morena en el Senado, Adán Augusto López Hernández, al ser cuestionado sobre si dejaría su cargo en octubre para asumir una embajada.
La interrogante surge en medio del escándalo por la orden de aprehensión contra su exsecretario de Seguridad, Hernán Bermúdez, señalado como líder del grupo criminal “La Barredora”.
Tras la sesión de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, López Hernández abandonó el antiguo recinto legislativo de Xicoténcatl. Durante su salida, periodistas intentaron obtener comentarios del senador, pero el personal de seguridad y su equipo impidieron la cobertura, incluso lanzando agua a los reporteros y camarógrafos.
Asimismo, se le preguntó sobre la denuncia presentada por el PAN ante la Fiscalía General de la República (FGR) en julio, que lo acusa de presuntos vínculos con el crimen organizado y con “La Barredora” durante su gestión como gobernador de Tabasco.
López Hernández se mantuvo firme: “Muchas gracias, yo no doy declaraciones”, reiteró. A pesar de la insistencia de los medios, el legislador evitó dar más explicaciones y se retiró en su camioneta blindada del antiguo recinto de Xicoténcatl.