El 2025 se perfila como el año con mayor volumen de precipitaciones pluviales del siglo XXI, superando la capacidad de las redes hidráulicas en varias ciudades del Estado de México y del país, informó Alberto Valdés Rodríguez, director del Organismo de Agua Potable de Tlalnepantla (OPDM).
En el nororiente del Valle de México, la cantidad de lluvia en los últimos 12 meses ha superado la media anual de 700 milímetros por metro cuadrado y podría alcanzar hasta 1,100 milímetros por metro cuadrado debido a la temporada de huracanes y lluvias tropicales en el Pacífico. Durante este periodo, se registró un evento de 100 milímetros de agua por metro cuadrado, que rebasó los sistemas de drenaje en varias alcaldías de la entidad y de la Ciudad de México, además de verse afectado por acumulación de basura.
En Tlalnepantla, ocho puntos en vialidades primarias y secundarias presentan anegaciones recurrentes pese a los trabajos de limpieza, desazolve y mantenimiento de cárcamos. Entre ellos se encuentran Avenida Gustavo Baz y Reyes Heroles en Tequexquináhuac; Periférico Norte a la altura de Valle Dorado; Avenida Jinetes en Las Arboledas; Prolongación Avenida Hidalgo en Barrientos; y Periférico Norte frente a la empresa Kimex. También se reportan bajo puentes en Santa Mónica, Avenida de los Jinetes en Valle Dorado y la conexión entre Los Maestros y Mario Colín, cerca del centro comercial Sentura.
Valdés Rodríguez destacó la importancia de implementar alternativas que reduzcan las anegaciones en las zonas urbanas más vulnerables, incluyendo la construcción de líneas de drenaje adicionales y la rehabilitación de cárcamos. Señaló que el actual Ayuntamiento de Tlalnepantla desarrolla estrategias para evitar que los ciudadanos se acostumbren a las inundaciones, como ocurrió en la administración anterior.
A pesar de la situación económica heredada por la pasada administración, el gobierno municipal busca recursos con la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), el gobierno del Estado de México e iniciativa privada para la realización de obras, incluyendo la reparación de cárcamos dentro del Plan Integral de Zona Oriente.
El funcionario explicó que también se estudia la opción de trasladar el agua hacia el norte, donde existe mayor infraestructura hidráulica, mediante una perforación direccional que no afecte los carriles centrales del Periférico, aunque implicará una inversión millonaria.
