Durante su conferencia matutina, la presidenta Claudia Sheinbaum confirmó que las aerolíneas mexicanas aceptaron ceder espacios de despegue y aterrizaje (slots) en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) a compañías de Estados Unidos, como parte de un acuerdo bilateral que busca destrabar tensiones recientes en materia aérea.
De acuerdo con la mandataria, la decisión surge tras un periodo de presión diplomática por parte del gobierno estadounidense, que reclamaba afectaciones a rutas de carga y a operaciones previamente pactadas. Sheinbaum afirmó que el ajuste se realizó “en un marco de cooperación”, aunque reconoció que el tema generó debate dentro del sector.
Especialistas advierten que la cesión de slots podría modificar la competencia entre aerolíneas, beneficiando temporalmente a empresas estadounidenses con mayor capacidad operativa. También podría tener efecto sobre las finanzas del transporte aéreo nacional, especialmente para compañías que dependen del AICM como su principal hub.
La presidenta aseguró que la medida será evaluada de forma constante y que el Gobierno buscará equilibrar los intereses comerciales con la necesidad de mantener relaciones bilaterales estables. Asimismo, reiteró que el AIFA seguirá siendo impulsado como alternativa para redistribuir operaciones y despresurizar el saturado aeropuerto capitalino.
Hasta el momento, las aerolíneas mexicanas no han emitido posicionamientos adicionales sobre los alcances económicos de la medida.
