Un informe reciente revela que los cárteles mexicanos utilizan conciertos musicales y criptomonedas como nuevas vías para el lavado de dinero. Promotores musicales y artistas vinculados a cárteles habrían mezclado ingresos legales provenientes de giras y plataformas digitales con capital del crimen organizado.
En paralelo, se documenta el uso de criptomonedas y estafas con tiempos compartidos, empleados para mover o disimular ganancias ilícitas. El Cártel de Sinaloa aprovecha las criptomonedas por su facilidad de traslado transfronterizo, mientras que el Cártel Jalisco Nueva Generación opera fraudes dirigidos a personas mayores en EE.UU. mediante call centers fraudulentos.
Fuente: elpais.com