La Gaza Humanitarian Foundation (GHF), una organización registrada en febrero de 2025 en Delaware y Ginebra con apoyo de Estados Unidos e Israel, anunció el cierre definitivo de sus operaciones en la Franja de Gaza. La entidad, que operó durante cinco meses, distribuyó un total de 187 millones de comidas a la población local antes de suspender actividades el 10 de octubre de 2025, coincidiendo con el inicio de un alto al fuego entre Israel y Hamás.
John Acree, director ejecutivo de la GHF, indicó en un comunicado que el cierre responde al cumplimiento de su objetivo principal: demostrar un método alternativo para la entrega de asistencia humanitaria. La fundación inició sus distribuciones el 26 de mayo de 2025, tras un bloqueo israelí de dos meses que limitó la entrada de alimentos y suministros básicos a la región. Sus sitios operaron en el sur de Gaza, con tres centros cerca de Rafah y uno en la zona central, cerca del corredor Netsarim.
Inicialmente, se planificó una expansión a más ubicaciones, pero estos esfuerzos no se materializaron debido a restricciones logísticas y financieras.
El alto al fuego, mediado por Estados Unidos y efectivo desde el 10 de octubre, reestableció al sistema de Naciones Unidas como canal principal de distribución de ayuda. Este acuerdo incluyó la detención de hostilidades, la liberación parcial de rehenes y un aumento en la entrada de convoyes humanitarios. Fuentes israelíes confirmaron que la suspensión de la GHF se alineó con esta transición, permitiendo que agencias como UNRWA retomen operaciones en más de 200 puntos de distribución previos.
Durante su período activo, las actividades de la GHF enfrentaron interrupciones repetidas. En junio de 2025, los sitios cerraron temporalmente por aglomeraciones y amenazas reportadas de grupos armados, incluyendo acusaciones contra Hamás por interferir en el transporte de personal. La fundación recibió 30 millones de dólares de Estados Unidos y 100 millones de un donante no revelado, con seguridad proporcionada por contratistas privados como Safe Reach Solutions y fuerzas israelíes.
La Oficina de Derechos Humanos de la ONU registró 875 muertes de palestinos en incidentes relacionados con la búsqueda de alimentos hasta julio de 2025, de las cuales 674 ocurrieron cerca de sitios de la GHF. Informes de testigos y autoridades locales en Gaza atribuyeron estas bajas a disparos de fuerzas israelíes, contratistas y pandillas armadas, en un contexto de hambruna declarada por la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria por Fases (IPC). La GHF disputó estas cifras, calificándolas de infladas, y reportó solo dos ataques terroristas contra su personal, sin bajas en los perímetros inmediatos de los centros.
Expertos de la ONU y más de 200 organizaciones no gubernamentales, incluyendo Médicos Sin Fronteras y UNRWA, solicitaron en agosto de 2025 el desmantelamiento inmediato de la GHF, argumentando violaciones a principios humanitarios como neutralidad e imparcialidad. En julio, el gobierno suizo ordenó el cierre de la filial de la fundación en Ginebra por deficiencias legales. La entidad surgió como alternativa a los canales de la ONU, con el fin de evitar desvíos de ayuda, según funcionarios israelíes que alegaban saqueos por parte de Hamás.
Con el cierre, la distribución de ayuda en Gaza regresa al marco de Naciones Unidas, que reporta un incremento en la entrada de camiones desde el alto al fuego.
Autoridades palestinas y de la ONU estiman que más de 2 millones de residentes enfrentaron riesgo de hambruna durante el bloqueo, con 180 muertes por desnutrición confirmadas en las últimas semanas de operaciones de la GHF, incluyendo 93 niños. El proceso de cierre de la fundación se extenderá en las próximas semanas, según fuentes internas.
