La agricultura urbana está en expansión en muchas grandes ciudades del mundo. Con la urbanización creciente y los problemas relacionados con el abastecimiento de alimentos frescos, los huertos urbanos están ganando terreno en techos, balcones y espacios vacíos de la ciudad. Esta tendencia permite a los residentes cultivar alimentos de manera local, reduciendo la huella de carbono asociada con el transporte de productos agrícolas.
Este tipo de agricultura no solo favorece la autosuficiencia alimentaria, sino que también fomenta el uso eficiente del espacio urbano. Los gobiernos y las organizaciones locales están comenzando a apoyar estos proyectos mediante la creación de incentivos y la facilitación de acceso a tierras para los agricultores urbanos. A medida que la tecnología avanza, nuevas soluciones de cultivo vertical y sistemas hidropónicos están abriendo nuevas posibilidades para aquellos que viven en zonas densamente pobladas.
