EL HOMBRE QUE TRANSFORMÓ LA LIMPIEZA DE VIDRIOS EN UN NEGOCIO DE ESCENAS DE CRIMEN

Ben Giles inició su trayectoria laboral limpiando ventanas en la localidad de Cardigan, en Gales. A los 16 años, tras dejar la escuela, se dedicó a esta actividad en el oeste de la región. Un encargo para limpiar una propiedad abandonada durante una década, que contenía residuos acumulados como heces y plagas, generó un pago de 2.664 dólares. Este episodio marcó el inicio de una expansión hacia servicios de limpieza en situaciones complejas.

La empresa de Giles pasó a manejar limpiezas en sitios con restos biológicos, como fluidos de cadáveres no descubiertos por meses o espacios afectados por violencia doméstica. Uno de los casos involucró la remoción de una ballena de 20 toneladas en Portsmouth, que requirió corte y transporte para su disposición. Otro incluyó la extracción de desechos de un baño cubierto de sangre. Actualmente, la compañía procesa entre 50 y 100 encargos semanales, con la policía como cliente principal.

Giles, de 49 años y originario de una familia de granjeros, incorporó en el año 2000 una acreditación para manejo de riesgos biológicos. Inicialmente, practicó con limpiezas de salsa de tomate. Su equipo utiliza trajes de protección completos y métodos como disolventes y desinfectantes. Ha capacitado a 3.500 personas en estas técnicas. La operación creció de dos o tres trabajos mensuales a su volumen actual en 25 años.

En su autobiografía, “La vida de un limpiador de escenas del crimen”, Giles describe experiencias como la muerte de un bebé por ataque de un perro o el hallazgo de una mujer víctima de golpes. El proceso de escritura permitió procesar emociones reprimidas durante el trabajo, donde prioriza la contención para completar las tareas. Su esposa, Lindsey, proporciona apoyo emocional, y actividades como paseos en la playa o contacto con animales ayudan en su manejo personal.

El negocio opera sin rechazar encargos, desde acumulaciones extremas hasta restos de animales. Giles enfatiza la evolución de los estándares de protección, de mascarillas básicas a equipos integrales. La empresa mantiene contratos con autoridades locales y atiende demandas crecientes en limpiezas especializadas.

Compartir: