Hugo Chávez, quien gobernó Venezuela desde 1999 hasta su fallecimiento en 2013, fue una figura clave en la historia reciente del país y un líder cuya influencia trascendió las fronteras de Venezuela. Nacido el 28 de julio de 1954 en Sabaneta, Venezuela, comenzó su carrera política en el ámbito militar y, tras un fallido intento de golpe de estado en 1992, logró la presidencia en 1998 mediante elecciones democráticas.
Durante su gobierno, Chávez impulsó una serie de reformas sociales y económicas denominadas la “Revolución Bolivariana”, que incluyeron la nacionalización de sectores estratégicos como el petróleo, la creación de misiones sociales para los más desfavorecidos y un enfoque en la redistribución de la riqueza. En el ámbito internacional, adoptó una postura crítica hacia Estados Unidos, fomentando la cooperación con gobiernos de izquierda en América Latina, como Cuba, y forjando alianzas con países como Irán.
Aunque sus políticas ganaron popularidad en ciertos sectores, también recibió críticas tanto internas como internacionales por su estilo autoritario, el control de los medios de comunicación y la concentración de poder en el Ejecutivo. Además, sus políticas económicas fueron objeto de controversia debido a la dependencia del precio del petróleo y la falta de diversificación de la economía.
En 2011, Chávez fue diagnosticado con cáncer, lo que afectó su capacidad para desempeñar el cargo en varios períodos. Finalmente, el 5 de marzo de 2013, falleció a los 58 años. Su muerte dejó a Venezuela en un contexto de incertidumbre política y económica, y abrió paso a la sucesión de Nicolás Maduro, quien asumió la presidencia tras las elecciones de 2013.
El legado de Hugo Chávez sigue siendo objeto de debate. Para algunos, fue un líder que mejoró las condiciones de vida de los sectores más vulnerables, mientras que para otros, su gobierno fue un periodo de polarización y crisis económica. Su figura continúa siendo un tema divisivo tanto en Venezuela como en la región.