Durante la filmación de la película Split, el actor James McAvoy percibió que su compañera de reparto, Anya Taylor-Joy, mostraba señales de tensión al enfrentar las escenas junto a él. Según declaraciones posteriores, McAvoy notó que Taylor-Joy experimentaba un nivel elevado de nerviosismo ante su interpretación.
Para aliviar el ambiente y generar una mayor comodidad, el actor optó por realizar bromas entre toma y toma, además de entablar conversaciones personales con la actriz, con el fin de disminuir la presión emocional del rodaje.
Originalmente, el personaje interpretado por McAvoy iba a ser desarrollado por Joaquin Phoenix. Sin embargo, Phoenix se retiró del proyecto dos semanas antes del inicio de la producción, lo que llevó al reemplazo por parte de McAvoy.
