El Tribunal de Apelaciones de Estados Unidos confirmó que TikTok será prohibido en el país a partir del 19 de enero, a menos que su empresa matriz, ByteDance, venda la plataforma a empresarios estadounidenses. Esta decisión deriva de una ley aprobada en abril que estableció un plazo de nueve meses para concretar la venta.
Si la prohibición se hace efectiva, la aplicación desaparecerá de las tiendas digitales en Estados Unidos, lo que impedirá nuevas descargas y actualizaciones. Esto afectará directamente a los 150 millones de usuarios en ese país, que utilizan la plataforma para entretenimiento, comunicación y negocios.
A nivel global, TikTok seguirá disponible, pero si se realiza una venta parcial, la versión estadounidense podría experimentar cambios significativos en su diseño, funcionalidades y políticas. Esto representaría un cambio relevante para la experiencia de los usuarios en ese mercado.
El fundamento de la prohibición radica en preocupaciones de seguridad nacional, bajo el argumento de que TikTok podría compartir información de sus usuarios con el gobierno chino. ByteDance ha rechazado estas acusaciones y argumenta que las medidas vulneran derechos empresariales y de libertad de expresión.
La compañía ha apelado la decisión y es posible que el caso sea revisado por la Corte Suprema. Además, la postura del presidente electo Donald Trump será determinante para el futuro de la aplicación en Estados Unidos, ya que podría buscar acuerdos que permitan su continuidad en el país.
El resultado de este conflicto no solo afectará a TikTok en Estados Unidos, sino que también podría influir en decisiones regulatorias sobre plataformas digitales en otras naciones.
