En lo que va del año 2024, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha llevado a cabo una intensa labor de limpieza y desazolve en el Valle de México, retirando más de 20,276 toneladas de residuos sólidos de canales, ríos, túneles y drenes. Esta cifra alarmante refleja la magnitud del problema de la contaminación y acumulación de basura en la infraestructura hidráulica de la región.
Según informes de Conagua, los desechos más comunes extraídos incluyen plásticos, muebles como salas y refrigeradores, llantas, autopartes, alfombras y una variedad de basura doméstica. La directora de Organismo Cuenca Aguas del Valle de México (OCAVM), Citlalli Elizabeth Peraza, ha enfatizado la importancia crítica de mantener despejados los sistemas de desagüe para prevenir inundaciones y otros problemas derivados del mal manejo de residuos.
Durante el periodo del 8 al 14 de julio, se activaron múltiples veces protocolos de desalojo urgente del drenaje pluvial para mitigar los efectos de las lluvias intensas, subrayando la urgencia y la complejidad de gestionar adecuadamente los residuos en la zona metropolitana.
Los esfuerzos de limpieza y desazolve se concentran en puntos estratégicos como las plantas de bombeo El Caracol, La Caldera y Casa Colorada Profunda, donde se concentra una gran cantidad de desechos provenientes del Gran Canal del Desagüe, el Dren General del Valle de México, el Túnel Emisor Oriente y otros cuerpos hídricos relevantes.
La problemática no solo afecta el entorno ambiental, sino que también representa un riesgo significativo para la infraestructura hidráulica y la seguridad de los habitantes del Valle de México. Conagua hace un llamado a la población en general para que adopte prácticas responsables de disposición de basura, evitando así que esta llegue a coladeras, drenajes e infraestructuras de desalojo de agua, contribuyendo así a la mitigación de riesgos y a la protección del medio ambiente.
