La actriz británica Maggie Smith, conocida por su magistral interpretación de la profesora Minerva McGonagall en la emblemática saga de “Harry Potter”, ha fallecido a los 89 años en un hospital de Londres. La noticia fue compartida por sus hijos, Chris Larkin y Toby Stephens, quienes expresaron su profundo dolor y la devastación que siente la familia por la pérdida de una madre y abuela tan extraordinaria.
Nacida el 28 de diciembre de 1934 en Essex, Maggie Smith comenzó su carrera actoral a los 18 años y rápidamente se destacó en el teatro, donde interpretó papeles memorables en obras clásicas. Su talento la llevó a ser considerada una de las actrices más influyentes de su generación, junto a figuras como Vanessa Redgrave y Judi Dench. Su versatilidad la permitió transitar con éxito entre el teatro, el cine y la televisión, creando una rica y variada filmografía.
En el ámbito teatral, Smith brilló en clásicos de Shakespeare, interpretando a personajes icónicos como Desdémona en “Otelo” y Lady Macbeth en “Macbeth”. Su habilidad para capturar la complejidad de estos roles le valió el reconocimiento crítico y una sólida base de admiradores. A lo largo de su carrera, también destacó en obras contemporáneas, como “Vidas privadas” de Noel Coward y “Hedda Gabler” de Henrik Ibsen, dejando una huella indeleble en el teatro británico.
El cine también fue un campo en el que Smith dejó su marca. Participó en una variedad de películas que se convirtieron en clásicos, como “Una habitación con vistas”, “Viajes con mi tía” y “Gosford Park”, por mencionar solo algunas. Su interpretación en “Harry Potter”, donde interpretó a la estricta pero cariñosa McGonagall, resonó con el público de todas las edades, y su presencia en la saga contribuyó a la creación de un mundo mágico que ha cautivado a generaciones.
En la televisión, su papel como Violet Crawley, la condesa de Grantham en “Downton Abbey”, consolidó su estatus como una de las figuras más queridas de la pantalla. La serie, que se convirtió en un fenómeno global, le permitió explorar un nuevo faceta de su talento y conectarse con una audiencia aún más amplia. Su actuación en “Downton Abbey” le valió varios premios y consolidó su legado en la cultura popular.
A lo largo de su ilustre carrera, Maggie Smith recibió numerosos reconocimientos y premios, incluyendo dos premios Oscar, siete BAFTA y tres Globos de Oro. También fue nombrada Comendadora de la Orden del Imperio Británico y más tarde ascendida a Dama Comendadora por la Reina Isabel II, un honor que refleja su contribución significativa al arte y la cultura.
Smith nunca se detuvo, manteniéndose activa en el ámbito artístico hasta sus últimos años, asistiendo a eventos y participando en proyectos que continuaron demostrando su pasión y compromiso con la actuación. Su presencia en la industria fue siempre admirada y su legado perdurará en las obras que dejó atrás, en la memoria de quienes la admiraron y en el corazón del público que se enamoró de sus personajes inolvidables.
El fallecimiento de Maggie Smith marca el fin de una era en el cine y el teatro, pero su influencia perdurará, recordándonos la profundidad y la belleza que trajo a cada uno de sus papeles. Su arte seguirá vivo, resonando a través de las generaciones y manteniendo su memoria siempre presente en el mundo del espectáculo.