La actriz se ha mantenido firme en su empeño de defender al personaje lo mejor que sabe y así lo va demostrar muy pronto con el estreno de la cinta el próximo 26 de mayo. Pero si hay algo que la ha ayudado por encima de todo a la intérprete ha sido la reacción de niñas en todo el mundo que se han sido felices al verse representadas en sus películas.
El perfil de las princesas Disney de sus primeros clásicos de animación siempre ha sido el mismo, mujeres blancas. Esto cambió con la cinta de Tiana y el sapo (2010), pero no ha sido hasta la presentación de Bailey como Ariel cuando millones de niñas negras en todo el mundo veían hecho realidad un sueño en carne y hueso.
Estoy feliz de ser esa representación para ellas
Bailey, al conocer las críticas pero también todo lo positivo que estaba haciendo a otra parte del público, ha reconocido que se siente “orgullosa” solo con pensarlo o decirlo. “Es realmente importante para mí ver reacciones a algo en lo que he trabajo con mucho esfuerzo durante mucho tiempo”, asegura la actriz en una entrevista recogida por Freeda.