A solo 15 minutos de Ámsterdam, en la ciudad de Weesp, se encuentra Hogeweyk, un barrio diseñado exclusivamente para personas que viven con demencia o Alzheimer. Aunque a simple vista parece un pueblo europeo común, sus calles, bares y tiendas forman parte de un entorno controlado y seguro. Los trabajadores que interactúan con los residentes son cuidadores profesionales que no usan uniforme y actúan como vecinos, para mantener una atmósfera cotidiana y cercana.
En este espacio, cada detalle está adaptado para reducir el estrés y promover una vida activa. Los residentes no son conscientes de que viven en un entorno especializado, lo que les permite mantener una rutina libre, con autonomía supervisada. La idea detrás de este modelo es que, al replicar una vida común dentro de un entorno protegido, se mejora la calidad de vida y se puede ralentizar el deterioro cognitivo.
Hogeweyk ha llamado la atención internacional por su enfoque humanizado y se ha convertido en inspiración para proyectos similares en países como Canadá, Francia y Australia.