Hong Kong, una de las regiones más pobladas e importantes del gigante asiático ha sido víctima de escándalos cuando de condiciones humanas se trata.
La situación ha llamado la atención de algunos usuarios quienes se asombran de las condiciones precarias que ofrecen a los habitantes en cuestión de vivienda. Aunque no es de sorprenderse al saber que la urbe asiática es la ciudad con el precio de vivienda más caro en el mundo.
¿La solución? ¡Casas ataúd!
Se tratan de cubículos de un aproximado de 2 a 9 metros cuadrados hechos de alambre, los cuales son acomodados en espacios comunes.
Se estima que un aproximado de 200,000 personas viven en estas “casas” que más bien parecieran rejas apiladas, simulando literas, dentro de edificios en los cuales la gente suele convivir.
