El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó que la inflación general en México se moderó a 3.51% anual en julio de 2025, un nivel inferior al 4.32% registrado en junio y por debajo de la mediana de 3.53% proyectada por analistas encuestados por Bloomberg. Este dato, el más bajo desde diciembre de 2020, coloca a la inflación dentro del rango objetivo del Banco de México (Banxico), que busca mantenerla en 3% con un margen de un punto porcentual.
El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) mostró un incremento mensual de 0.27%, menor al 0.28% del mes anterior. La inflación subyacente, que excluye productos volátiles como alimentos y combustibles, se situó en 4.23% anual, ligeramente por debajo del 4.24% de junio. Entre los productos con mayores alzas destacaron la col y lechuga (17.44%), los nopales (13.04%) y el huevo (5.91%). Por otro lado, frutas como la uva (-18.35%) y la guayaba (-9.80%) registraron las mayores bajas de precio.
El dato de inflación refuerza las expectativas de un recorte de 25 puntos base en la tasa de interés de Banxico, que actualmente se encuentra en 8%, durante su reunión del 7 de agosto de 2025. Analistas de Banco Base sugieren que, aunque la inflación general está dentro del rango meta, la inflación subyacente por encima del 4% podría llevar a una pausa en los recortes para evaluar la trayectoria a largo plazo. La gobernadora de Banxico, Victoria Rodríguez, había señalado en junio que los ajustes futuros serían más graduales tras cuatro recortes consecutivos de 50 puntos base.
La desaceleración inflacionaria ocurre en un contexto de crecimiento económico débil, con proyecciones de Banxico que estiman un aumento del PIB de solo 0.6% para 2025, afectado por recortes al gasto público y la incertidumbre derivada de las políticas arancelarias de Estados Unidos. La fortaleza del peso mexicano y una demanda interna moderada también han contribuido a contener las presiones inflacionarias.