En México, 3.7 millones de niñas, niños y adolescentes de entre 5 y 17 años realizan alguna actividad laboral, según datos de la Encuesta Nacional de Trabajo Infantil (ENTI) 2022. Esta cifra refleja la participación de menores en diversos sectores, incluyendo actividades agrícolas, comerciales e industriales.
De ese total, aproximadamente 1.4 millones de menores están involucrados en trabajos clasificados como peligrosos o prohibidos por la ley mexicana. Estas actividades se consideran riesgosas debido a la naturaleza del trabajo o las condiciones en las que se desempeñan, como exposición a sustancias químicas, maquinaria pesada o jornadas extenuantes.
Los estados con mayor incidencia de trabajo infantil son Guerrero, Chiapas, Oaxaca, Puebla y Michoacán, de acuerdo con la ENTI 2022. Las autoridades han señalado la necesidad de implementar políticas públicas para reducir estas cifras y garantizar el cumplimiento de las leyes que protegen los derechos de los menores.