Alejandro Moreno, presidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), respondió a las acusaciones de Gerardo Fernández Noroña, senador de Morena, tras un enfrentamiento físico ocurrido el 27 de agosto en la última sesión de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión. Moreno señaló que Fernández Noroña busca distraer la atención de la controversia sobre una propiedad valuada en 12 millones de pesos que el senador adquirió en Tepoztlán, Morelos.
El conflicto se originó al concluir la sesión, después de que Fernández Noroña, presidente de la Mesa Directiva, no otorgó la palabra a Moreno, quien reclamó su intervención. Según videos difundidos, Moreno se acercó a la Mesa Directiva, lo que derivó en empujones y agresiones entre ambos. Fernández Noroña afirmó que Moreno lo amenazó de muerte y agredió a su colaborador Emiliano González, quien resultó con lesiones visibles. Otros legisladores del PRI, como Carlos Gutiérrez Mancilla y Erubiel Alonso, también fueron señalados por participar en el altercado.
La casa de Fernández Noroña, adquirida en noviembre de 2024 mediante un crédito hipotecario, ha generado debate por su valor de 12 millones de pesos, según la declaración patrimonial del senador. Moreno cuestionó la congruencia de Fernández Noroña con los principios de austeridad de Morena, sugiriendo que las acusaciones en su contra son un intento de desviar el escrutinio público sobre esta adquisición.
El altercado ha reavivado el debate sobre la inmunidad parlamentaria en México. Mientras Fernández Noroña insiste en que la agresión fue premeditada, Moreno sostiene que su reacción fue en respuesta a provocaciones. La controversia se suma a tensiones previas, incluyendo señalamientos de Moreno contra funcionarios de Morena y una solicitud de desafuero en su contra por presuntas irregularidades durante su gestión como gobernador de Campeche.