Usuarios de la aplicación de transporte Uber han reportado un creciente número de denuncias por una presunta práctica que deriva en el cobro doble de sus viajes. De acuerdo con testimonios, algunos conductores estarían recibiendo pagos en efectivo sin registrarlos en la plataforma, lo que provoca que los pasajeros aparezcan como deudores en el sistema.
La situación se presenta cuando un usuario solicita un viaje con la modalidad de pago en efectivo. Al finalizar el trayecto, el pasajero entrega el dinero al conductor. Sin embargo, posteriormente, la plataforma envía un aviso señalando que el monto del servicio no ha sido cubierto, generando un segundo cobro al usuario o la restricción de su cuenta.
Durante las últimas semanas, las denuncias por este tipo de situaciones han aumentado en redes sociales. En múltiples casos, los usuarios afirman que, pese a presentar evidencia del pago entregado directamente al conductor, la aplicación no reconoce la transacción ni ofrece una solución efectiva.
Hasta el momento, Uber no ha emitido una postura oficial que aclare las medidas que tomará frente a este tipo de reclamos. La empresa ha señalado en ocasiones anteriores que cada incidente debe ser revisado de forma individual a través de su centro de soporte, aunque los usuarios afectados aseguran no recibir respuestas concretas.
El aumento de denuncias ha generado un debate sobre la necesidad de fortalecer los mecanismos de control y verificación en los cobros en efectivo dentro de este tipo de plataformas. Especialistas en movilidad digital han subrayado la importancia de garantizar trazabilidad en todas las formas de pago para evitar inconsistencias que afecten al usuario.
Ante esta situación, se recomienda a los pasajeros conservar evidencia del pago, como fotografías del dinero entregado, mensajes con el conductor o capturas del viaje concluido. También se sugiere evitar el uso de efectivo cuando sea posible y optar por métodos digitales que queden registrados automáticamente.
El incremento de estos reportes ha llamado la atención de organizaciones de consumidores y autoridades locales, lo que podría derivar en futuras investigaciones regulatorias sobre las operaciones de la empresa. Mientras tanto, las denuncias continúan en aumento en distintos puntos del país.