La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, pidió este miércoles a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que asuma un papel activo ante la escalada de tensiones entre Estados Unidos y Venezuela, con el objetivo de prevenir un posible derramamiento de sangre en la región.
En su conferencia matutina desde Palacio Nacional, Sheinbaum reiteró la postura histórica de la política exterior mexicana basada en los principios de no intervención, no injerencia extranjera, autodeterminación de los pueblos y solución pacífica de controversias. Señaló que estos principios se encuentran consagrados en la Constitución y deben guiar las acciones internacionales para evitar conflictos armados.
El pronunciamiento ocurre en medio de un aumento de tensión geopolítica tras el anuncio de medidas de presión de Estados Unidos, incluida la orden de un bloqueo naval a petroleros venezolanos y acusaciones formuladas por el gobierno de Donald Trump, que han sido calificadas por Caracas como actos agresivos. Sheinbaum criticó la falta de intervención visible de la ONU hasta el momento y urgió a que el organismo utilice sus mecanismos diplomáticos para contener la crisis.
Sheinbaum también promovió el uso del diálogo y la negociación pacífica como caminos para la resolución de disputas internacionales, rechazando cualquier forma de intervención militar. Además, expresó la disposición de México para apoyar esfuerzos multilaterales que busquen una salida pacífica al conflicto, sin importar las opiniones sobre gobiernos específicos involucrados.
