¿PODEMOS VOLVERNOS LOCOS SEGÚN EL GUASÓN?

-Salvador Solis.

Hay una historia que impactó a varios fanáticos de Batman titulada “The Killing Joke” o “La Broma Asesina” en español por lo oscura que se ha manejado y siendo una de las historias más perturbadoras que envuelven al murciélago vigilante de Gótica, la cual también pone a pensar sobre el punto el cual quiere llegar el Guasón.

Tanto en el cómic como en diversas adaptaciones este villano de Batman se pasa de la raya, pues le dispara a Bati-chica (Bárbara Gordon) y la viola con el objetivo de atormentar al Comisionado Gordon (El padre Bárbara) y tratar de demostrar que para volverse loco solo se necesita tener un mal día como él lo tuvo cuando se convirtió en un payaso psicópata. Tratando de corromper a un hombre con una voluntad aparentemente inquebrantable, un policía con un historial intachable en una ciudad sumergida en la corrupción.

Además de hacerle semejante daño a Bárbara, secuestró al Comisionado para continuar la tortura con golpes y un túnel lleno de fotos de como el guasón violaba a su hija. Al final llega Batman a rescatarlo, y aunque Gordon está destrozado emocionalmente le pide a Batman que atrape al Guasón sin romper las reglas y con todas las de la ley. Al final el Guasón pierde en este acto de tratar de probar su punto, pero al espectador siempre lo deja pensando.

¿Realmente para perder la cordura hace falta eventos así de traumáticos en tan solo 1 día?