El Consejo General del Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) dio ayer luz verde a la iniciativa ciudadana que propone la prohibición de los espectáculos con animales, incluidos los eventos taurinos, tras verificar que la propuesta había logrado reunir las firmas de apoyo necesarias para ser considerada como de carácter preferente en el Congreso local. Con 27,442 rúbricas validadas, la iniciativa buscará ahora el debate y eventual aprobación en el Legislativo capitalino.
En respuesta a este avance, Jesús Sesma, líder del grupo parlamentario del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), manifestó que su bancada votará a favor de la iniciativa. Aseguró que, desde su posición, trabajará para convencer a otros legisladores sobre la necesidad de erradicar las corridas de toros. “Somos respetuosos de quienes no apoyen la propuesta, pero nosotros sí lo haremos. Iniciaremos el trabajo de cabildeo con todos los diputados”, expresó Sesma, quien remarcó que, para su partido, la evolución hacia la no violencia y el cuidado de los seres vivos es fundamental.
Por otro lado, la coordinadora de Morena en el Congreso de la Ciudad de México, Xóchitl Bravo, apuntó que el grupo parlamentario está comprometido a escuchar todas las opiniones sobre el tema y actuará en función de lo que la mayoría de la ciudadanía desee. “Vamos a analizar cómo se puede homologar la reforma federal para la protección animal con esta iniciativa local”, explicó Bravo. Aclaró que la postura de Morena será en última instancia determinada por la voluntad popular, pues según su visión, la ciudadanía pide una mayor protección para los seres vivos no humanos.
La Comisión de Puntos Constitucionales e Iniciativas Ciudadanas, encargada de la discusión de la propuesta, recibió ayer a diversos actores de la industria taurina. Entre ellos, Ramiro Alatorre, presidente de la Asociación Nacional de Criadores de Toros de Lidia, quien resaltó que la actividad taurina genera miles de empleos directos e indirectos y que la preservación de la raza de toros de lidia tiene un valor económico y cultural significativo en México. Alatorre indicó que las 266 ganaderías de toros de lidia del país aportan a la economía nacional, especialmente en áreas marginadas.
En la misma línea, Alejandra Arroyo, representante de la Plaza de Toros Arroyo, destacó el impacto turístico y económico que la tauromaquia tiene para la Ciudad de México y otras regiones del país. Mario Zulaica, de la Plaza de Toros México, también subrayó que el espectáculo taurino atrae anualmente a millones de personas y genera una cadena de empleos que beneficia a diversas comunidades.
Sin embargo, algunos sectores expresaron su desacuerdo con la prohibición. Fabiola Poblano, del Consejo Autónomo de Pueblos y Barrios Originarios de la Ciudad de México, subrayó la importancia de consultar a las comunidades originarias sobre este tipo de decisiones, señalando que la tauromaquia forma parte de su patrimonio cultural. Asimismo, Edgar Herrejón, miembro del Comité Jurídico de Tauromaquia Mexicana, afirmó que la propuesta de prohibir las corridas de toros sería una violación a la libertad cultural y a una tradición que lleva siglos en el país.
Dentro del grupo de Morena, el diputado Pedro Haces Lago se mostró también en contra de la medida, argumentando que el Congreso debe ser un espacio inclusivo en el que se consideren todas las voces de la sociedad. Haces destacó la relevancia de la tauromaquia no solo como una tradición, sino también como una actividad económica que involucra a muchas personas en el país. A su juicio, la prohibición afectaría a los empleos y a la preservación de una raza de toros que, según él, no debe desaparecer.
La discusión sobre la posible prohibición de las corridas de toros en la Ciudad de México continuará en las próximas semanas, mientras se analizan los argumentos de ambos lados. La iniciativa será evaluada en el Congreso local, donde se espera un intenso debate sobre la protección de los animales y la preservación de las tradiciones culturales en el país.