El diputado ruso Pavel Krupnik presentó una propuesta ante las autoridades para realizar una inspección oficial a figuras coleccionables de estilo anime y manga, específicamente aquellas que representen a menores de edad en poses sugestivas o con vestimenta interior.
La iniciativa argumenta que este tipo de artículos puede ser perjudicial para el desarrollo psicológico infantil y, en algunos casos, podría considerarse una forma de contenido inapropiado comparable con la pornografía, lo cual violaría las leyes de protección a menores vigentes en Rusia.
Aunque la propuesta no menciona marcas, modelos o fabricantes específicos, en redes sociales comenzaron a circular imágenes de figuras que podrían estar sujetas a revisión. Usuarios han identificado representaciones de personajes menores de edad con rasgos físicos o posturas consideradas inapropiadas bajo esta normativa.
La medida ha abierto el debate sobre si esta propuesta se mantendrá enfocada exclusivamente en este tipo de figuras, o si derivará en una posible censura más amplia sobre productos culturales relacionados con el anime, incluidos personajes de series como Death Note o Tokyo Ghoul, que ya han sido objeto de controversia en el pasado en territorio ruso.
Por ahora, no se ha informado si la propuesta pasará a revisión legislativa formal ni si se aplicará una prohibición total o selectiva.