Shein, minorista global de moda rápida actualmente domiciliado en Singapur, estudia trasladar su sede central a China continental con el fin de facilitar su salida a Bolsa en Hong Kong. Esta posibilidad surge tras los intentos fallidos de cotizar en Nueva York y Londres, que no contaron con la aprobación necesaria de las autoridades chinas.
De acuerdo con medios internacionales, la empresa ha consultado con despachos legales sobre la creación de una empresa matriz en China. Esta alternativa permitiría que los ingresos quedaran sujetos a la jurisdicción fiscal china y facilitaría la supervisión regulatoria sobre sus datos, aspectos clave para obtener el visto bueno del organismo regulador del mercado.
La estrategia implicaría revertir el traslado efectuado en 2021 hacia Singapur. En caso de concretarse, la sede en China se convertiría en la matriz del grupo, mientras que las operaciones en Singapur y otros países se mantendrían como filiales.
Este posible cambio ocurre en un contexto de caída en sus resultados financieros. En 2024, Shein registró una reducción cercana al 40 % en beneficios netos, además de enfrentar la competencia de Temu y restricciones comerciales en Estados Unidos y la Unión Europea. Su valoración también ha disminuido, pasando de alrededor de 100 000 millones de dólares a unos 30 000 millones.
De confirmarse la reubicación, la salida a Bolsa en Hong Kong se perfila como la opción más viable para la compañía en 2025, posicionándose como una de las operaciones financieras más relevantes en la región durante el año.
