Activision decidió no aceptar la propuesta de Steven Spielberg para dirigir la adaptación cinematográfica de la franquicia de videojuegos Call of Duty y cedió los derechos de producción a Paramount Pictures.
Spielberg presentó el proyecto a través de su productora Amblin Entertainment, solicitando control creativo total, derecho al corte final, supervisión de la producción y el marketing, además de un acuerdo financiero específico. La compañía no aceptó estas condiciones y optó por transferir el control del proyecto.
Actualmente, Spielberg trabaja en una nueva producción de ciencia ficción escrita por David Koepp y protagonizada por Emily Blunt, Josh O’Connor y Colin Firth, que será distribuida por Universal Pictures.
El director cuenta con una trayectoria que incluye títulos como E.T., Jurassic Park, La lista de Schindler, Minority Report, Bridge of Spies y Ready Player One. Mientras tanto, la expectativa por la película de Call of Duty se mantiene, impulsada por las más de 500 millones de copias vendidas de la saga y su base global de seguidores.