El 9 de septiembre de 2024, se formó la tormenta tropical Francine en el Golfo de México, y las autoridades meteorológicas han emitido alertas sobre su posible impacto en México. De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), Francine podría evolucionar a un huracán, lo que incrementaría su potencial de causar severas condiciones meteorológicas en el país.
Francine se encuentra actualmente a unos 300 kilómetros al este-sureste de La Pesca, Tamaulipas, y a 395 kilómetros al sureste de la desembocadura del río Grande, que marca la frontera con Estados Unidos. La tormenta tiene vientos máximos sostenidos de 85 kilómetros por hora y rachas de hasta 100 kilómetros por hora, y se desplaza hacia el nor-noroeste a una velocidad de 7 kilómetros por hora.
El pronóstico indica que Francine podría provocar lluvias extraordinarias en Tamaulipas, torrenciales en Veracruz, e intensas en Chiapas, Guerrero, Nuevo León, Oaxaca y Puebla. Aunque la tormenta podría tocar tierra en Luisiana, Estados Unidos, como huracán categoría 1, México aún podría experimentar efectos significativos debido a las lluvias intensas y posibles inundaciones.
El SMN, en coordinación con el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, ha establecido una zona de vigilancia por efectos de tormenta tropical que abarca desde Barra del Tordo, Tamaulipas, hasta la desembocadura del río Grande. Las autoridades locales están en alerta y recomiendan a la población mantenerse informada sobre el desarrollo de la tormenta y tomar precauciones necesarias.
La trayectoria y evolución de Francine seguirán siendo monitoreadas de cerca para actualizar las alertas y garantizar la seguridad de los residentes en las áreas potencialmente afectadas.
