La destacada maratonista ugandesa Rebecca Cheptegei falleció en la noche del pasado domingo en Eldoret, Kenia, a los 33 años, tras un brutal ataque de su pareja, el keniano Dickson Ndiema Marangach. La atleta, reconocida por su constancia y pasión en el deporte, sufrió quemaduras en el 80% de su cuerpo después de que Marangach presuntamente la rociara con gasolina y le prendiera fuego.
Cheptegei, una de las maratonianas más rápidas de su país, había estado ingresada en el hospital de Eldoret, donde finalmente se confirmó su fallecimiento. La tragedia ocurre en un contexto de creciente preocupación por la violencia de género y destaca la vulnerabilidad de las mujeres, incluso en ámbitos donde han alcanzado éxito y reconocimiento.
Rebecca Cheptegei había dedicado quince años a su carrera profesional, compitiendo en numerosos eventos internacionales, incluyendo los recientes Juegos Olímpicos de París, donde obtuvo el cuadragésimo puesto en la maratón femenina. A lo largo de su carrera, Cheptegei había logrado importantes victorias y se había establecido como una atleta de primer nivel en Uganda.
Nacida el 22 de febrero de 1991 en Bukwo, Uganda, Cheptegei inició su carrera en el atletismo en 2010, obteniendo rápidamente reconocimiento por sus habilidades. Su primera victoria importante llegó en el München Pfingst Meeting en Alemania, y desde entonces su carrera estuvo marcada por la participación en eventos prestigiosos, como el Campeonato Mundial de Campo a Través en España y la media maratón de Madrid.
La tragedia también ha revelado aspectos personales de la vida de Cheptegei. Residía en Kinyoro, un área del condado keniano de Trans Nzoia, donde había adquirido un terreno y construido una casa para su familia. Sin embargo, la relación con Marangach se había deteriorado debido a desacuerdos sobre la propiedad del terreno, lo que finalmente llevó a este violento desenlace.
El padre de la atleta, Joseph Cheptegei, expresó su angustia y preocupación por la seguridad de los hijos de Rebecca y sus propiedades, pidiendo al gobierno keniano que brinde protección a la familia. “He perdido a una hija que me ha estado ayudando de muchas maneras”, declaró Joseph, destacando el apoyo financiero que Rebecca brindaba a su familia, especialmente para la educación de sus hermanos.
Sebastian Coe, presidente de World Athletics, lamentó profundamente la pérdida de Cheptegei, describiéndola como una atleta “increíblemente versátil” con un futuro prometedor aún por delante. “Nuestro deporte ha perdido a una atleta talentosa en las circunstancias más trágicas e impensables”, señaló Coe, reflejando el pesar global por la muerte de una figura que había inspirado a muchos tanto dentro como fuera del ámbito deportivo.La conmoción por la muerte de Rebecca Cheptegei resuena en el mundo del atletismo y más allá, poniendo de relieve la necesidad urgente de abordar la violencia de género y proteger a las mujeres en todos los ámbitos de la vida.