Liam Payne, exintegrante de la banda One Direction, falleció el 16 de octubre de 2024 tras caer desde un balcón de su habitación en un hotel de Buenos Aires. Las primeras versiones sobre su muerte indicaron que podría haberse tratado de un accidente, y más detalles han comenzado a salir a la luz en los días posteriores.
El informe oficial de las autoridades argentinas indicó que Payne estaba bajo los efectos de varias sustancias cuando ocurrió el incidente. Se confirmó que había ingerido una mezcla de drogas, incluida la cocaína, además de alcohol y medicamentos prescritos. La combinación de estas sustancias fue clave en su caída, según fuentes cercanas a la investigación.
Testigos del hotel informaron que en los momentos previos a su caída, Payne había mostrado un comportamiento agitado. Varias personas que estaban en el lugar mencionaron que él causó disturbios en el lobby del hotel, siendo escoltado de regreso a su habitación en al menos tres ocasiones. Además, en su última visita al vestíbulo, se desmayó, lo que llevó a su caída fatal.
La situación personal de Payne en sus últimos días también podría haber influido en su estado mental. Según informes, el cantante estaba lidiando con una serie de problemas legales y personales, incluidos desacuerdos con su exnovia, Maya Henry, quien había solicitado una orden de cese y desista contra él justo antes de su muerte.
Además de estos factores, Payne estaba pasando por dificultades emocionales relacionadas con la pérdida de su privacidad y las tensiones en sus redes sociales. Las consecuencias de estos conflictos personales se reflejaron en su comportamiento errático en los días previos al trágico incidente.
La muerte de Liam Payne ha generado una gran cantidad de reacciones de sus seguidores, quienes han expresado su dolor en redes sociales. La investigación oficial sigue su curso, y más detalles sobre las circunstancias del accidente podrían ser revelados en las próximas semanas.