Desde junio de 2023, 23 perros han sido encontrados sin vida en el Bosque de Nativitas, Xochimilco. Todos los animales presentan huellas de tortura, lo que contrasta con el diagnóstico oficial de atropellamiento. El primer caso se reportó cuando un corredor encontró un perro con severas lesiones y mutilaciones, sin columna vertebral y con órganos expuestos.
A lo largo de los siguientes nueve meses, se han registrado 22 casos adicionales con características similares. Testigos han observado huellas de sangre en las áreas cercanas, sugiriendo que los cuerpos fueron arrastrados hasta el lugar. Vecinos, visitantes y activistas han señalado lo que consideran un patrón de violencia sistemática contra los perros, pero las autoridades han desestimado las denuncias, atribuyendo las muertes a atropellamientos.
La activista Alelí Vital, preocupada por la falta de respuesta adecuada, inició una petición en change.org en noviembre de 2023, dirigida al alcalde de Xochimilco, José Carlos Acosta. Vital denuncia que la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial de la Ciudad de México (PAOT) ha ignorado las pruebas y las demandas de los ciudadanos. El dictamen pericial del médico legista, que afirma que las muertes se deben a atropellamientos, ha sido criticado por no contar con la especialización adecuada en medicina veterinaria.
Vital y otros activistas han organizado marchas y manifestaciones, solicitando una revisión del caso y una reunión con el alcalde. Según Vital, la fiscalía ha considerado dos posibles líneas de investigación: un asesino serial y una secta, aunque ella descarta la segunda opción. Afirma que el perfil criminológico realizado sugiere un posible asesino serial, pero que las autoridades no han tomado medidas adicionales.