El bebé que fue abandonado en Tultitlán, Estado de México, el pasado 11 de febrero, fue dado de alta tras recibir atención médica en el ISSSTE. Las autoridades informaron que su estado de salud es estable y que, tras completar estudios médicos y recibir vacunas preventivas, fue entregado al Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) del Estado de México, que asumirá su custodia legal a través de la Procuraduría estatal de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes.
Por su parte, los padres del menor, Lucio David “N” y Diana Jaciel “N”, enfrentan un proceso legal por homicidio en grado de tentativa. Un juez los vinculó a proceso y determinó prisión preventiva justificada mientras se lleva a cabo la investigación, la cual tiene un plazo de cuatro meses. De ser hallados culpables, podrían recibir una sentencia de hasta 40 años de prisión.
El caso ha generado reacciones en la sociedad y reavivado el debate sobre el abandono infantil y la necesidad de reforzar programas de apoyo a madres y padres en situación vulnerable. Autoridades y organismos de derechos de la infancia han reiterado la importancia de garantizar la protección y bienestar del menor.