San Salvador Atenco, Estado de México, enfrenta una situación preocupante luego de que las intensas lluvias provocaran el desborde del Río Papalotla y el surgimiento de enormes grietas en terrenos de siembra cercanos. Estas grietas, algunas de hasta 300 metros de longitud, 50 metros de profundidad y 1.5 metros de ancho, se han manifestado con particular intensidad cerca de la colonia Amanal, poniendo en riesgo al menos una vivienda en la zona.
El descubrimiento de estas fisuras profundas ha movilizado a los ejidatarios del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra, quienes han realizado recorridos exhaustivos en compañía de personal de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat). Durante estos recorridos se ha confirmado la presencia de grietas en al menos 15 puntos a lo largo del río, sugiriendo un fenómeno extendido y preocupante para la comunidad local.
Las autoridades y especialistas están investigando las posibles causas de estas grietas, explorando la hipótesis de que la repentina saturación de agua en terrenos previamente secos pueda haber desencadenado tensiones estructurales en el subsuelo. Este fenómeno no solo representa una amenaza para la agricultura local, crucial para la economía de la región, sino también un peligro potencial para la infraestructura y la seguridad de las familias que residen cerca de las zonas afectadas.
A medida que continúa la evaluación de los daños y se investigan las causas subyacentes, la comunidad de San Salvador Atenco enfrenta un desafío significativo en la gestión y mitigación de los efectos de estas grietas, subrayando la necesidad urgente de medidas preventivas y de apoyo gubernamental para enfrentar esta emergencia local.
